Equilibrio de la vida

CONSTRUYENDO UNA VIDA FELIZ 

Para poder lograr una vida en armonía y felicidad, es importante tener una estabilidad mental y tener las metas claras, actuar siempre con la mejor disposición y tener carácter para afrontar las diferentes situaciones que plantea la vida. Una persona que vive feliz, es aquella que no se deja amedrentar.

“Ser feliz significa autorrealizarse, alcanzar las metas propias de un ser humano. Aristóteles, discípulo de Platón, sostenía que todos los hombres perseguían la felicidad. Unos son felices ganando dinero; otros, recibiendo honores, y otros viajando. Cada cual posee el secreto de su propia felicidad. Pero para eso hay que conocerse bien a uno mismo, claro está, y saber qué se quiere.”

“Aristóteles afirma que la felicidad es una actividad de acuerdo a la virtud. El hombre feliz vive bien y obra bien”

“El hombre que hace que todo lo que lleve a la felicidad dependa de él mismo, ya no de los demás, ha adoptado el mejor plan para vivir feliz”. Platón (427 a.C. - 347 a. C.)”

Podemos ver cómo Platón y Aristóteles comparten su punto de vista en lo que concierne a la felicidad. Ellos dos comparten dos elementos puntuales que son: 

• El buen obrar del hombre, lo lleva a la felicidad. Realizar buenas acciones les da una paz interior. 
• El hombre considera felicidad a todo aquello que él hace por sus propios medios y que es planeado y ejecutado a la perfección. Es decir, sus logros le causan felicidad.

“Lao Tzu sostenía que la razón de su felicidad era vivir el presente. Quienes siempre piensan en el mañana o recuerdan con nostalgia el ayer solo generan ansiedad, estrés, y dejan de disfrutar el momento y la verdadera existencia”

“La felicidad; más que un deseo, alegría o elección, es un deber”. Immanuel Kant (1724-1804)”

Este pensamiento de Kant, me lleva a pensar que realmente fuimos creados para ser feliz, es por eso que el ser humano tiene la capacidad de alegrarse por pequeñas cosas y crear un ambiente de paz y alegría fácilmente. Fuimos creados para ser feliz y para alegrar al otro, esa es nuestra esencia, es nuestro llamado; ser felices.